Debate sobre los ‘corridos tumbados’ y su relación con la violencia en México
En los últimos meses, los ‘corridos tumbados’ se han convertido en un tema de debate en México, tanto por su impacto cultural como por la controversia que generan. Este subgénero del regional mexicano, popularizado por artistas como Peso Pluma y Natanael Cano, ha sido criticado por su presunta relación con la violencia y el narcotráfico. Sin embargo, también ha sido defendido como una forma de expresión artística y una evolución natural del género.
Orígenes de los corridos tumbados
Los corridos tumbados tienen sus raíces en los corridos tradicionales, que narraban historias de personajes históricos y eventos importantes. Este subgénero combina elementos de trap y hip-hop con las letras y melodías típicas de los corridos, creando una mezcla única que ha capturado la atención de una nueva generación.
Controversias alrededor del subgénero
El historiador y músico Alejandro Mercado Villalobos ha analizado cómo la prohibición de los corridos tumbados podría aumentar su consumo, citando ejemplos históricos donde la regulación de géneros musicales tuvo un efecto contrario. Según Mercado Villalobos, factores como la pobreza y la marginación son determinantes en la violencia, más allá de la influencia musical.
Defensa artística y cultural
Defensores de los corridos tumbados argumentan que este subgénero refleja la realidad de muchos jóvenes en México, ofreciendo una ventana a sus experiencias y luchas. Además, destacan que es una evolución del regional mexicano que permite conectar con audiencias internacionales.
Impacto en plataformas digitales
Con millones de reproducciones en Spotify y YouTube, los corridos tumbados han demostrado su popularidad, especialmente entre los oyentes más jóvenes. Artistas como Natanael Cano han logrado llevar este subgénero a escenarios internacionales, aumentando su visibilidad y reconocimiento.
Los corridos tumbados representan una evolución del regional mexicano que, aunque controvertida, ha ampliado el alcance del género. A medida que el debate continúa, es importante reconocer tanto su impacto cultural como las complejidades que lo rodean.